jueves, 23 de junio de 2011

Primer tema de metodología

TEMA 1:
1.- Aspectos gnoseológicos.
En esta primera unidad nos detendremos en el enfoque gnoseológico de nuestra materia. Al hablar de los aspectos gnoseológicos estamos haciendo referencia a los aspectos relacionados con el conocimiento y en tal sentido nos preguntamos ¿qué es la ciencia? ¿qué tipo de ciencia es la que nos ocupa? ¿cuál es su ubicación en el cuadro general de la ciencias? como así también las cuestiones referidas a la delimitación de su método y objeto de estudio.
Para que haya conocimiento son necesarios dos elementos. Por un lado alguien que conoce: el Sujeto cognoscente (el que conoce). Por otro lado aquello que se conoce: el Objeto cognoscible (lo que puede conocerce, el “ob-yectum” en latín que significa aquello que se presenta). La relación que se entabla entre ambos elementos en tanto reúna determinadas características es el “acto de conocer”.
En esta relación cognoscitiva, el sujeto capta, aprehende al objeto. El objeto se vuelve inteligible para el sujeto. Tal aprehensión se produce cuando queda como resultado una imagen. Esta se constituye con las características captadas en el objeto por el sujeto. Esta imagen se denomina idea, noción, concepto. Sólo habrá conocimiento si la imagen repite las propiedades del objeto.
En principio se conocen los objetos que nos rodean, aquellos que ocupan un lugar en el espacio y el tiempo (objetos reales). También pueden aprehenderse los estados mentales (afectos, pensamientos, deseos) también pueden conocerse las ideas que no tienen existencia temporo-espacial como así también los números, las figuras geométricas.
sale
S O
vuelve
En el acto de conocer el Sujeto es el encargado de trascender, es decir ir más allá de sí mismo. Para ello sale, llega hasta el objeto y regresa. Al volver el Sujeto se ha modificado, ha aprehendido las características del Objeto, posee ahora una imagen.
En este acto de conocer se desarrollan distintos saberes, con diferente grado de veracidad, confiabilidad y extensión. Podemos establecer dos tipos de conocimientos.
a) Conocimiento empírico: se obtiene a través de nuestros sentidos. Es espontáneo, vulgar, ingenuo. Es el conocimiento del hombre del común, el de la calle, constituye mera opinión. Son reflexiones de sentido común ya que la vida del hombre común está entretejida de incidentes y encuentros que la gente considera y generaliza. Ej: está nublado va a llover.
b) Conocimiento científico: es metódico, reflexivo, crítico, propio de la filosofía y de la ciencia. Se trata de conocimiento fundamentado. Al ser objetivo requiere un lenguaje preciso y unívoco, comunicable a cualquier sujeto.
1.- PROCESOS DEL CONOCIMIENTO. SABER VULGAR Y CIENTÍFICO.
1.1. Saber vulgar y saber científico.
Todos los hombres poseen mayores y menores conocimientos según el grado y modo de participación en la totalidad de la cultura. En todos los hombres existen saberes y conocimientos, pero por las formas o tipos de adquisión pueden discernirse dos modos principales (aunque existen otros como el filosófico, el mítico, el religioso...):
- el saber cotidiano o vulgar.
- el saber científico.
Se sabe, pues, de manera natural por el solo hecho de vivir, y se sabe científicamente cuando existe disposición de conocer con arreglo a ciertos procedimientos.
a) Saber cotidiano.
Es el saber o conocimiento que se adquiere en la experiencia cotidiana. Se trata de conocimientos inconexos entre sí, a veces superficiales, constituidos por una yuxtaposición de casos y hechos. Es el modo común, corriente y espontáneo de conocer que se adquiere en el trato directo con los hombres con las cosas, es ese saber que llena nuestra vida diaria y que se posee sin haberlo buscado o estudiado, sin aplicar un método y sin haber reflexionado sobre algo.
Su contenido es la suma de todos nuestros conocimientos sobre la realidad que utilizamos de un modo efectivo en la vida cotidiana y del modo más heterogéneo (como guía para las acciones, como tema de conversaciones etc.) Existe un determinado mínimo de saber cotidiano. ¿Cuál es ese mínimo?, pues, la suma de los conocimientos que todo sujeto debe interiorizar para poder existir y moverse en su ambiente. Según las épocas y los estratos sociales, cambia el contenido y extensión del saber cotidiano.
Este saber cotidiano se caracteriza por ser superficial, no sistemático y acrítico.
- Cuando decimos que es superficial no es en el sentido de frívolo, insustancial o ligero, sino de que se conforma con lo aparente, con lo que comprueba en el simple pasar junto a las cosas. Se expresa en frases como porque me lo dijeron, porque lo vi, porque lo leí, porque todo el mundo lo dice; para este tipo de conocimiento el criterio de evidencia inmediata es suficiente.
- Otra característica que se le atribuye al saber de la vida cotidiana, es la de ser no sistemático, tanto en la forma de adquirirlos y vincularlos como en el modo de establecer cánones de validación. Se limita a percibir lo inmediato a través de experiencias, vivencias, estados de ánimo y emociones de la vida diaria, permaneciendo al nivel de certeza sensorial. El mismo sujeto organiza las experiencias y conocimientos de un modo no sistemático.
- Decíamos que también es acrítico, puesto que apoyado sólo en la evidencia inmediata, sólo percibe la epidermis de la realidad. Los conocimientos del saber vulgar pueden ser verdaderos o no, lo cierto es que la pretensión de serlo no se plantea de una manera crítica o reflexiva. Como ya se dijo, es un conocimiento que está al nivel de certeza sensorial, o sea, un saber que puede decir acerca de lo que pasa, pero no porque pasa lo que pasa.
b) Saber científico.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que en nuestra época el saber cotidiano está penetrado por el saber científico. Se trata de algo reciente que se ha verificado paralelamente a la difusión de los medios de comunicación de masas. El saber cotidiano acoge (o puede suceder que acoja), ciertas adquisiciones científicas, pero no el saber científico como tal.
En su práctica social el hombre se enfrenta a una serie de problemas que no puede resolver con los conocimientos corrientes, ni por sentido común. Por otro lado, para el hombre que naturalmente desea saber, como decía Aristóteles, no le basta la captación de lo externo, ni el sentido común, puesto, que existen fenómenos que no se captan en el solo nivel perceptivo. Es preciso superar la inmediatez de la certeza sensorial del conocimiento ordinario. Este salto -que no supone una discontinuidad radical en lo que hace a la naturaleza, pero sí en cuanto al método- conduce al conocimiento científico.
Cuadro 1.1. Oposiciones entre el saber vulgar y científico
SABER VULGAR O COTIDIANO
SABER CIENTÍFICO
Superficial
Profundo o sólido
Asistemático o desordenado
Sistemático o metódico
Acrítico
Critico o auto-correctivo
Doxa o opinión
Episteme o comprobado
1.2. Evolución de la noción de ciencia.
La palabra ciencia se deriva etimológicamente en las lenguas modernas del vocablo latino scientia. En el latín ciencia tiene un sentido muy amplio y significa: conocimiento, práctica, doctrina, erudición. Esta concepción latina de ciencia concuerda con el significado del origen de su raíz, el verbo latino scio que se deriva a su vez del griego isemi. Este verbo griego equivale también a saber, en toda la extensión de la palabra: conocer, tener noticia de, estar informado.
Por tanto, ciencia en su acepción original y más general, equivale a toda clase de saber. Sin embargo, históricamente, ciencia vino a significar, de modo más preciso, un conjunto de conocimiento sistematizado sobre una materia. Esta noción coincide con lo que hoy entendemos por disciplina. Y así, en este sentido, se puede decir que en la Edad Media las ciencias o disciplinas por antonomasia fueron la Filosofía y la Teología.
Con el desarrollo del saber experimental y la insistencia en el método inductivo, el concepto de ciencia ha quedado reservado modernamente para el conocimiento teórico, inductivo y sistemático sobre la realidad, derivado de la observación y experimentación metódicas.
1.3. Concepto y características actuales de la ciencia.
La ciencia se puede definir, en sentido estricto, como un conjunto de conocimientos sobre la realidad observable, obtenidos mediante el método científico.
Según esta definición son tres los elementos esenciales de la ciencia, que configuran su naturaleza: Un contenido, un campo de actuación y un procedimiento o forma de actuar.
a) La ciencia en cuanto a su contenido está constituida exclusivamente por un conjunto de conocimientos sobre la realidad, en forma de términos y de enunciados. Las ideas de este conjunto se hallan interrelacionadas entre sí y forman lo que se llama la teoría.
Es necesario darse cuenta de que la ciencia aunque se refiere a la realidad empírica, no está formada por hechos sino en todo caso por ideas. El hombre solo puede captar la realidad conceptualmente.
b) El campo de actuación propio y único de la ciencia es la realidad observable, la realidad de este mundo en que vivimos. Lo no empírico, digamos lo trascendente, cae fuera del campo de la ciencia. Esta no se puede pronunciar como tal, ni sobre su verdad, ni sobre su falsedad.
c) Por último, la ciencia utiliza como procedimiento o forma de actuación en la formación el conjunto de conocimientos que la integran, el método científico, que es el que la tipifica, como se ve a continuación.
1.4. El método científico.
Si analizamos etimológicamente la palabra método vemos que deriva de las raíces griegas metá y odos. Metá (hacia, a lo largo) es una proposición que da idea de movimiento y odos que significa camino. Por esto, en su estructura verbal, la palabra método quiere decir camino hacia algo, persecución, o sea, esfuerzo para alcanzar un fin o realizar una búsqueda. Método como forma ordenada de llevar a cabo determinadas acciones.
Lo más característico y específico de la ciencia, aquello que la constituye como tal y la distingue de los demás tipos de conocimiento es el método científico. La ciencia no se distingue de otros tipos de conocimiento por los objetos sobre los que versa.
La ciencia, pues, no es otra cosa que un conjunto de conocimientos obtenidos por la aplicación del método científico, y, por tanto, es el resultado de este método.
Por ello, un científico es, ante todo, no el que tiene muchos conocimientos sobre una materia determinada, lo que es importante y valioso, sino quien sabe utilizar correcta y eficazmente el método científico en su campo.
De aquí la importancia del método científico. A él hay que atribuir en gran parte, sin duda el extraordinario desarrollo de la ciencia. Se puede decir que la ha posibilitado.
No está demostrado que los hombres a partir del siglo XVII sean más inteligentes que los anteriores. Sin embargo, han hecho avanzar grandemente la ciencia porque abandonaron el método escolástico e iniciaron el método científico.
El método científico consiste en formular cuestiones o problemas sobre la realidad del mundo y los hombres, con base en la observación de la realidad y la teoría ya existentes, en anticipar soluciones a los problemas, mediante la observación de los hechos que ofrezca, la clasificación de ellos y su análisis.
- Método inductivo: Experiencia como punto de partida de generación de conocimientos.
- Método deductivo: Se establecen leyes generales (razonamiento) y se deducen consecuencias lógicas que se pueden contrastar con datos.
- Método hipotético deductivo. Conjunción de ambos. Conjunto de pasos secuenciados que se siguen al realizar una investigación:
a. Formulación del problema.
b. Formulación de la hipótesis.
c. Recogida de datos.
d. Análisis de datos y resultados.
e. Conclusiones y generalización de resultados.
1.5. Tipos de ciencia.
Delimitado el concepto de ciencia como un modo de adquisición de conocimiento de forma crítica y sujeto a un método, cabe ahora distinguir cuáles son los distintos tipos de ciencias.
En primer lugar podemos realizar una distinción entre ciencias normativas y ciencias positivas; mientras que la primera busca deducir a partir de un conjunto de principios y axiomas concluir cómo debería de ser la realidad, la segunda pretende inducir a partir de los datos empíricos y de los hechos como es la realidad. Resumiendo, las ciencias normativas como el derecho, ética y moral... son ciencias del deber ser frente a las ciencias positivas como la física, matemáticas, sociología..., que son ciencias del ser.
Cuadro 1.2. Oposiciones entre Ciencias Normativas y Positivas.
CIENCIAS NORMATIVAS
CIENCIAS EMPÍRICAS
OBJETO o BASE
El deber ser
El ser
METODOLOGÍA PRINCIPAL
Deductiva
Inductivo e
Hipotético-deductivo
PRODUCTO
Normas y principios
Leyes
EJEMPLOS
Ética, Derecho...
CC.NN. y CC.SS.
El objetivo de este tema era ubicar la sociología en el contexto de los saberes, y como adelanta el título la sociología nos la vamos a encontrar junto a las ciencias empíricas o positivas. Toca ahora, por tanto desarrollar brevemente que tipos de ciencias positivas hay y cuáles son sus diferencias.
2.- LAS CIENCIAS EMPÍRICAS: CC. DE LA NATURALEZA Y CC. SOCIALES
Las ciencias positivas nos habla de lo que son las cosas de los hechos, de lo empírico y la experiencia, de lo que nos rodea y de lo que somos; en definitiva, podemos distinguir dos tipos de realidades, por una parte, la naturaleza o todo lo que nos circunda, y por otra, el ser humano, es decir, todo aquello relacionado con lo que somos nosotros mismos. Esta distinción es la que pertenece a la diferencia entre ciencias naturales y ciencias sociales.
Cada una de estas dos ciencias positivas tuvieron un desarrollo distinto y en diferentes momentos históricos. Fue en el barroco cuando las ciencias naturales tuvieron su asentamiento como ciencia moderna con un avance importante en el mundo de la física y de la cosmología; mientras las ciencias sociales se configuran como tales, en el siglo XIX con la aparición de la sociología, psicología... Esta juventud de las ciencias positivas, y en particular de las ciencias sociales, no es obstáculo para que ya tengan una solera y un asentamiento en la historia contemporánea del saber.
El objeto de estudio de las dos clases de ciencias positivas: naturaleza y hombre; les diferencia en sus fundamentos o bases epistemológicas. La naturaleza, por su parte, está sujeta al determinismo, a la relación necesaria entre causa-efecto que el físico, químico intenta desentrañar. Por otra parte la dificultad de las ciencias sociales y del ser humano es que el propio sujeto de conocimiento es, a su vez, el que se coloca en situación de ser estudiado; un objeto que, además, se define por su libertad e indeterminismo en sus acciones, pensamientos y en su ser mismo.
No es extraño que el producto de estas dos ciencias positivas sea distinto, en una se formularán leyes absolutas, en la otra sólo podrá hablarse de probabilidades o leyes probables.
Cuadro 1.3. Oposiciones entre las Ciencias Naturales y Sociales.
CIENCIAS NATURALES
CC. SOCIALES Y HUMANAS
OBJETO o BASE
La naturaleza
El hombre
PRINCIPIO EPISTEMOLÓGICO
Determinismo
Indeterminismo (libertad)
METODOLOGÍA
Cuantitativa
Cuantitativa y cualitativa
PRODUCTO
Leyes absolutas
Leyes probabilísticas
EJEMPLOS
Física, química...
Sociología, Sicología...
Cuadro 1.4. Visión de conjunto de los saberes y sus subtipos.
S
A
B
E
R
SABER
VULGAR
SABER
CIENTÍFICO
CIENCIAS
NORMATIVAS
CIENCIAS
EMPÍRICAS
CIENCIAS NATURALES
CIENCIAS SOCIALES

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